...uno no se da ni cuenta!
Hay muchas maneras de
expresarse la madurez. Que uno no se dé por advertido, es otra cosa. El cuerpo
habla. La mente habla. Hablan los brazos y las demás extremidades. Habla la
piel, las uñas y las manos. Hablan las orejas, los ojos y la nariz. Habla el
cabello, los pelos y los vellos. Habla el pecho, la barriga y más abajo. Hablan
las cervicales, la L4 L5 y L5 S1 y el que está más abajo también habla. Hablan
los pies, las rodillas, los nudillos y hasta los codos hablan. Por último, habla
la boca! Dice lo que todos los anteriores callan!
Todos piensan que algún día llegarán a cierta edad, pero nadie parece tener la
certeza de cuándo llegó. Sin embargo existen indicadores, síntomas, situaciones
que delatan el arribo al incierto tiempo.
Algunos indicios que
hacen sospechar de la cercana presencia de la madurez, los podemos encontrar
descritos en los siguientes contextos:
Cuando al levantarte a
medianoche a hacer pipi, prefieres sentarte, y que para que tu esposa no se
despierte con el ruido de la débil e interrumpida micción.
Cuando al hacer pipi en
el patio, ves que tus zapatos terminaron empapados.
Cuando haces pipi parado, compruebas que amanecen charquitos en el baño.
Si te ha dado por
afeitarte con todas las luces del baño encendidas y ya últimamente te ha dado
por afeitarte con los espejuelos puestos, porque ahora llamas a los lentes,
espejuelos.
Si tienes lentes para
leer en el baño, en el carro, en la oficina, en la computadora y por último te
la pasas peleando porque no sabes dónde los dejas.
Si te la pasas peleando
porque no ves bien con los lentes, perdón con los espejuelos, y luego tu hijo o
nieto comprueba que les falta un cristal; a veces los dos.
Si cuando escuchas
música te descubres diciendo “cantantes los de antes”.
Si a los muchachos de
ahora te ha dado por llamarlos mariquitos
porque usan zarcillos y piercings.
Si te la pasas
despotricando del reaggetón y de los reagatoneros.
Si tus fiestas ahora
son sin música, y que pa podé convelsá!
Si no tomas agua
después de las 8 de la noche porque te puedes meá.
Si no tomas café
después de las 5 pm porque te puedes insomniar.
Si la peluquera o
peluquero pasa más tiempo afeitándote los pelos de las cejas, los moños de
pelos que se te hacen en las orejas y los largos pelos que te salen de la nariz
y que se confunden con el bigote.
Si cada Día de la
Juventud te envían y envías las cadenas sobre los saludos que te mandan Ivo, Trino
y Henry Stephen.
Si compruebas que en tu
casa las cajas de whiski y demás bebidas han crecido inversamente proporcional al
crecimiento de las cajas de fármacos y medicinas, que yacen en el baño, en la
mesita de noche y en la mesa de la cocina.
Si cuando terminas una
reunión, la gente se despide de ti diciéndote “que descanses”
Si con todas esas musas
andantes presentes en las redes sociales y en el país nacional te dedicas a escribir sobre la madurez, que es un
tema bien trillado y que a nadie le gusta y menos si se sienten aludidos, es
muy posible que estés dentro de aquel grupo a los cuales las mujeres de antes
decían “los hombre interesantes son los hombres de cierta edad”, coincidiendo
con las chicas de hoy quienes aún ven en ti a un hombre interés-antes, o sea …
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