jueves, 24 de marzo de 2016

La caducidad del proceso venezolano

El Chavismo:
¿con el boarding pass de regreso?


A partir de los resultados electorales del 6 de Diciembre de 2015                    –asombrosos para algunos, crónica de una muerte anunciada para otros- han sido muchas las explicaciones que se le ha buscado a tan enigmático efecto,  el cual vino a sembrar dudas acerca de la durabilidad del gobierno chavista, tanto a nivel del Ejecutivo Nacional, como a niveles locales y regionales. Lo cierto es que esta especie de Cisma de Occidente ha venido, al menos, a mover las neuronas de importantes analistas quienes se exprimen los sesos en busca de una explicación, la explicación, que coincida con lo que realmente ocurrió en tan fatídica fecha. En mi humilde opinión, la cual complementaré más adelante, 2019 marcaría la fecha de caducidad del chavismo, si se mantenía el gobierno haciendo lo mismo que venía haciendo; de modo que, de mantenerse la tendencia, 2015 no sería otra cosa que el inicio de la desaparición del gobierno izquierdista fundado por el Presidente Hugo Chávez.

Aunque el material hemerográfico afín al tema es sumamente denso, sobre todo el que viene aportando incansable e inaudiblemente el Prof Brito García, en esta crónica seguiremos con la tendencia a valorar más lo que nos viene de afuera, lamentable tendencia de lo que algunos llaman baja autoestima social, para lo cual echaremos manos de lo que un brasileiro, Frei Betto, nos cuenta de lo que a nosotros nos sucedió. Vaya paradoja!

Betto considera que en países como Brasil y Venezuela, los gobiernos se encargaron de suministrar a la población los recursos suficientes para que mejoraran sus condiciones materiales de existencia; solo que el que a las personas se les mejore sus niveles de vida solamente, no garantiza su adhesión incondicional con la mano que se lo suministra, afirmando categórico que "No podemos engañarnos, pues no se garantiza el apoyo popular a los procesos dando al pueblo sólo mejores condiciones de vida, porque eso puede originar en la gente una mentalidad consumista".

Si no basta crear universidades - decenas en el caso venezolano -  garantizar una educación gratuita, crear las condiciones para acceder a viviendas a bajos costos, a la salud gratuita, a la obtención de vehículos a bajísimos precios, a divisas para viajes al extranjero muy debajo del marcador  de paridad cambiaria, divisas a precios regalados para e-compras, facilidades para crear empresas y emprendimientos sociales – cooperativas, EPS, etc. – entonces, ¿dónde está puesto el acento que genera adhesión, lealtades y fidelidades con el proveedor de bienestar social?

Siguiendo en la línea del fraile dominico brasilero, la razón del retroceso de los gobiernos de izquierda tanto en Venezuela como en la América Latina en general,  está asociada a la falta de educación política e ideológica de las grandes masas que han visto mejorar cualitativamente sus condiciones materiales de vida.

En este sentido, confiesa Frei Betto que “el problema está en que no se politizó a la nación,  no se hizo el trabajo político, ideológico, de educación, sobre todo en los jóvenes, y ahora la gente se queja porque ya no puede comprar carros o pasar vacaciones en el exterior”.

Más adelante, Betto le añade contenido a la educación ideológica-política que ha debido diseñarse, al señalar que “el consumismo y la corrupción están matando la utopía en pueblos de nuestra América, como Argentina y otros, porque la gente no tiene perspectivas de sentido altruista, solidario, revolucionario, de la vida, se va hacia el consumismo, y eso afecta toda perspectiva socialista y cristiana, que es desarrollar en la gente valores solidarios. La solidaridad es el valor mayor tanto del socialismo como del cristianismo".

En resumen, el aporte de Frei Betto está en la justificación del retroceso, el cual se debe a la falta de trabajo político, educación ideológica y política y cuyo contenido, el contenido que habrán de recibir las masas a través de la Educación, esté impregnada de solidaridad, altruismo y amor. Con estos elementos, entendemos, sería posible construir una alternativa frente al deterioro de los modelos socialistas de la región y que marcan el reinicio de gobiernos de derecha, los cuales no han dejado de acecharnos con sus teorías del fin de la historia y del Neoliberalismo como única alternativa de vida en el planeta. Una especie de conductismo educativo, pues, garantizaría la continuidad de los modelos emergentes, ya que  todo aprendizaje trae cambios de conducta. 


LO MALO DE HACER UN GOBIERNO BUENO

Hacer un gobierno de los llamados buenos, entraña un grave problema si faltara algunas de las precondiciones expresadas por Frei Betto, porque hacer un gobierno bueno pasa por sacar a mucha   gente de la pobreza con el consecuente mejoramiento de sus condiciones materiales de existencia y la satisfacción de una serie de necesidades que hasta hace un rato se caracterizaban por una precariedad absoluta, pero cuya memoria fenece al  comenzar a disfrutar de un nuevo status social, sin que tercie para ello el efecto agradecimiento o el efecto lealtad, ya que, se entiende, que la responsabilidad de los Estados y sus gobiernos es mejorar las condiciones de vida de sus ciudadanos.

Así las cosas, satisfechas las necesidades básicas de las personas a expensas de los propios gobiernos,  comienza  pronto un proceso en que las nuevas castas se desacoplan del gobierno si éste no satisface las incipientes necesidades que nacen a la luz del nuevo statu quo de las personas.

Expliquémonos de una vez desde el esquema psicológico propuesto en la famosa cual controvertida, Pirámide de las Necesidades, del psicólogo humanista norteamericano Abraham Maslow, quien nos dice que  existen una serie de necesidades hacia las que los humanos se movilizan a satisfacer, tanto a través de sus propios medios, como a través de los medios que provee el Estado, adiciono yo; y que en la medida que algunas van siendo satisfechas, van naciendo otras nuevas hacia las cuales los seres humanos se dirigen a saldar, tal como vemos en el representación siguiente:


La Pirámide de Maslow, está compuesta por cinco niveles. Las necesidades básicas se ubican en la base de la pirámide, mientras que las necesidades más complejas se encuentran en la parte alta. Las cinco categorías de necesidades de la Pirámide de Maslow son: fisiológicas, de seguridad, de afiliación, de reconocimiento y de autorrealización; siendo las necesidades fisiológicas las de más bajo nivel.

En este sentido, en la base de la pirámide están las necesidades Fisiológicas, que son las más básicas de las necesidades ya que están relacionadas con la supervivencia y el orden biológico. Respirar, beber agua, comer, dormir, tener un refugio, en una palabra sobrevivir, es la manera de mantenerse a flote con esta necesidad.

En segundo término, están las necesidades de Seguridad, las cuales se satisfacen en la medida en que los individuos acceden a seguridad física, a un empleo, una vivienda, algún tipo de propiedad, provisión de la salud, ingresos, etc. Hasta que estas necesidades no están completamente satisfechas los individuos no movilizan recursos hacia las siguientes.
En seguida vienen las de Afiliación, descritas éstas  necesidades como menos básicas; tienen sentido cuando las necesidades anteriores están satisfechas. Ejemplos de estas necesidades son: el amor, el afecto y la pertenencia o afiliación a un cierto grupo social y buscan superar los sentimientos de soledad. Estas necesidades se presentan continuamente en la vida diaria, cuando el ser humano muestra deseos de casarse, de tener una familia, de ser parte de una comunidad, ser miembro de una iglesia o asistir a un club social.

Posteriormente tras cubrir las necesidades de los tres primeros niveles de la Pirámide de Maslow, aparecen las necesidades de Reconocimiento como la autoestima, el reconocimiento hacia la propia persona, el logro particular y el respeto hacia los demás; al satisfacer dichas necesidades, la persona se siente segura de sí misma y piensa que es valiosa dentro de la sociedad; cuando estas necesidades no son satisfechas, las personas se sienten inferiores y sin valor.

Por último, en el nivel más alto se encuentran las necesidades de Autorrealización y el desarrollo de las necesidades internas, el desarrollo espiritual, moral, la búsqueda de una misión en la vida, la ayuda desinteresada hacia los demás, etc.

Volvamos a lo que vinimos. Permanecer en los dos primeros niveles de la Pirámide de Maslow equivale a un nivel de precariedad de pobreza extrema y de pobreza, respectivamente. En estos niveles sólo la mano del Estado es capaz de sacar a las personas de esos estratos socio-económicos en los que se encuentran, o un golpe de suerte, de esos que ocurren una vez en millones de veces. Aunque hilando fino podemos decir que el gobierno, en este caso el venezolano, ha garantizado, con o sin la formación política ideológica (me inclino más por esta segunda) la prosecución o cumplimiento de la Pirámide de Maslow al menos hasta el tercer peldaño o el de la Afiliación, desamparando a las familias en sus procesos de Reconocimiento y Autorrealización, a los cuales han entrado acompañadas de nuevos ideales y principios.

En este sentido, cuando en Venezuela se instala el gobierno de Hugo Chávez en 1998, existía en el país 9.834.178 personas que eran calificadas como NO POBRES; mientras que 12.233.098 personas eran calificadas como POBRES. Entretanto, en estado de  POBREZA EXTREMA se encontraban 5.440.804 personas.

Quince años más tarde, es decir en 2013, los NO POBRES eran 19.415.005 personas. Los POBRES descendieron a 9.174.142 personas y la POBREZA EXTREMA disminuyó a 2.791.292 personas.

Veámoslo de la siguiente manera:

-         en 15 años se incorporaron a la NO POBREZA 9.580.827 personas.
-         En 15 años dejaron de ser POBRES 3.058.956 personas.
-         Y en 15 años abandonaron la POBREZA EXTREMA 2.649.512 personas.

En síntesis podemos decir que para el año 2013, hace tres años, 15 millones, 289.295 personas abandonaron la pobreza; son personas que en alguna medida, siguiendo a Maslow,  han visto cubiertas sus necesidades deficitarias (fisiológicas, seguridad, afiliación) y en estos momentos emprenden veloz carrera para satisfacer las necesidades cumbres de la Pirámide.

Para salir de los llamados niveles deficitarios, ha debido papá Estado estar presente con todos sus programas sociales, vale decir, Misiones y grandes Misiones y demás programas de financiamiento y auspicio al emprendimiento, tendiéndole la mano a los antiguos pobres extremos y pobres para superar la precariedad de la situación que los acuciaba y sin cuya ayuda hubiese sido poco menos que imposible desplazarse a través de la Pirámide de Maslow hacia niveles cada vez superiores en el empinado ascenso.

Ahora bien, toda esta gente que ha recibido el apoyo de un Estado Paternalista, por hacerme eco de Betto, cuya obra de gobierno ha estado centrada en la superación de la pobreza material, a través de los programas hace rato descritos, toda esa gente, repito, a dónde habrá ido a parar?

Desde el punto de vista estructural, disfrazo la pregunta, dónde se encuentran esos 15.289.295 personas que antes padecían de alguna modalidad de pobreza?

Según mi apreciación esos más de 15 millones de seres, comenzaron paulatinamente a desacoplarse de la capsula estatal, tal vez porque éste no tuvo más política para ellos, y junto a otro conglomerado de personas, marchan hacia la búsqueda del Reconocimiento y de la Autorrealización, para lo cual el antiguo Estado Benefactor, gracias al cual ellos pudieron moverse socialmente, utopía del Neoliberalismo, ha comenzado a ser un estorbo en sus planes de emancipación y superación del populismo, al que ven ahora como un monstruo ineficiente, pesado e incómodo al que es necesario rebasar cuanto antes.

En suma, esos 15 millones de personas han sido echados a los brazos de la inexplicable Clase Media, por lo que los reclamos a sus necesidades han cambiado dramáticamente de signo.

Ahora se preocupan por las divisas que el Estado está en la obligación de otorgarles para hacer viajes alrededor del mundo a una tasa cambiaria favorable. Ahora son los principales defensores con que cuenta los dueños de los grandes consorcios en su voracidad por la obtención de dólares, dólares y más dólares y en este macán reclaman como suyos los dólares electrónicos para realizar sus e-compras por internet, por supuesto, denunciando el despropósito del gobierno al otorgarles “apenas 650 USD para ir a Miami, como si con eso pudiéramos hacer algo”, independientemente de que nunca hayan ido al Tío Sam.

Lo que en síntesis quiero exponer es que esta gente, gracias al gobierno, se ha transformado en 15 años en Clase Media, lo que la hace asumir como suyo un comportamiento propio de esta clase social: olvido de sus orígenes, falsa creencia al identificarse con los poderosos, urgente necesidad de reconocimiento público, desprecio desmedido por todo lo que se parezca a pobreza, necesidad continua por la satisfacción de sus necesidades materiales, tendencia a un exacerbado consumismo, olvido del pasado como fuente de la historia para la comprensión del presente, tendencia a la trivialización de los problemas más acuciantes que vive el país y el mundo entero y, últimamente, valorar desmedidamente la adquisición de una ciudadanía universal por encima de la suya propia.

No me voy a extender  haciendo fenomenología de la Clase Media; pero lo que sí es bueno destacar es que a esta Clase Media han venido a parar los más de 15 millones de habitantes que han salido de la pobreza en Venezuela durante los últimos tres lustros. A esta Clase Media han venido a parar sin que hayan sido educados políticamente, ideológicamente, sin que les hubieren inculcado valores y principio como la solidaridad y el amor a la Patria.

Y esto ha sido así porque nadie ha inventado una Teoría Revolucionaria para la Clase Media, y menos otra para ayudar a sus ciudadanos al logro del Reconocimiento y la Autorrealización de sus vidas; porque nadie ha pensado que esta clase pueda en algún momento liderizar un movimiento emancipatorio, más allá de una lucha espasmódica para proteger sus propios intereses difusos. Por otro lado, esa Clase Obrera a la que la teoría le confiere un papel protagónico, esa clase obrera venezolana, dados los altos ingresos que posee, logrados durante las “luchas” por acomodarse económicamente, tampoco es una genuina clase trabajadora, habiendo logrado también asirse a la Clase Media, adquiriendo todos los modales pequeño-burgueses que la caracteriza.

Por ello, ya para finalizar, este proceso revolucionario democrático venezolano, único en su especie, tiene fecha de caducidad si, entre otras maromas que tiene que hacer, no logra desarrollar en lo inmediato una teoría y una praxis dirigida a la formación para la vida en revolución o como quiera que se le quiera llamar, aún dentro de la delimitación de la Clase Media, ya que pareciera que todo lo dicho por Frei Betto, luce ya extemporáneo en el caso venezolano, si es que consideramos como buenas las cifras y datos que he aportado en esta crónica.

Así pues, que hacer un buen gobierno en lo social, no siempre es garantía de asegurar continuidad electoral en el futuro.

Lo que me pregunto, entonces, ya para despedirme, es: si hacer un buen gobierno en lo social no asegura la continuidad del proyecto político,¿no se acelerará la entrega del boarding pass de retorno si además se hace un mal gobierno en otros aspectos de la vida del país? Ahhh?