- - El coño de la madre de
Maduro, gritó mi prima Ciela en el apartamento que su mamá había conseguido por
la GMVV.
- - Qué pasa ahora?
Preguntò la tìa con mucha calma, acostumbrada ya a esas expresiones.
- - Nada, que Santos
amenaza con romper relaciones por culpa de ese idiota y si lo hace se me cae el
negocio de las carteras de cuero colombiano que voy a buscar a Cúcuta, no joda.
Una amplia sonrisa se
dibujò en el rostro de la tía, mientras se alejaba cabizbaja en aquel
apartamento en el que, aún siendo suyo, estaba en minoría con respecto a sus
dos hijas viejas y sus cuatro nietos.
No pasaron muchos días
cuando la tìa volvió a escuchar a la otra prima, o sea hija, exclamar:
-No me jodas, Nicolás,
ni pa esta vaina sirves!
Otra vez sobresaltada
mi tía Esther corrió a preguntar qué le pasaba:
- - No joda, que por sus
metidas de pata constantes, me jugué el cochino y viene y sale el carnero. No
me joda ese guevón!
Nuevamente mi tìa se
iría con una sonrisa socarrona, satisfecha por la mala suerte de sus hijas por
culpa del Presidente Maduro.
Al cabo de unos días la
historia se volvería a repetir con un sonoro:
- - El coñísimo de la
madre, ya de este país uno no podrá irse!
Esta vez la tía no se
aguantó y en tono por demás irónico le preguntó:
-
Qué pasó? No podrás ir
a tomar té al reino Unido con la reina Isabel?
- - No me jodas, mamá,
sabes que las cosas nos tan pa eso! Por
culpa de tu presidente, resulta que ahora los venezolanos no podremos entrar a
Panamá sin visa! Te parece poco?
- - Pero bueno, mijita, usa
la American, o la Dainers, o master car. Por qué tiene que ser la Visa?
Preguntó la tía haciéndose la pendeja.
- - No me hagas arrechar
más, mamá! Respondió mi prima con toda la autoridad que le confiere ser la
chula mayor de mi anciana tía.
Harta de tanta sorna la
tía esta vez reaccionaría en tono más alto y agudo:
- - Aquí la que se está
arrechando soy yo! Desde cuándo carajo tú tienes visa o pasaporte, si es que tú
no pisas la Diex desde que yo hace 40 años te saqué la cédula?
-Y ultimadamente,
en esta verga no se habla mal de Chávez ni del Presidente Nicolás Maduro Moros.
He dicho, no joda!
La paz parecía que se
había adueñado de aquel hogar, hasta que las hostilidades comenzaron nuevamente
al filo del mediodía de este Viernes, cuando la menor de las viejas, alborozada,
daba el parte de guerra:
- - Por culpa de Maduro,
Trump aplica sanciones a todos los chavistas por pendejos y por estar
metiéndose y retando al más grande imperio del mundo. Ahora que se jodan! Bien
hecho plátano jecho!
La tía no se aguantó
más y le espetó:
- - Mira, muchacha, aquí la
única que sufre de brutalidad congénita, por línea paterna, eres tú, porque de
aquí en adelante no vas a tener ni el agua oxigenada para teñirte los
chicharrones, así que más vale que te vayas al kiosko de lotería y mete todos
los números que puedas del burro y por si acaso no te es suficiente con el del
burro, entonces dile al kioskero que también te meta la paloma … no joda!
Fue tan fuerte el
portazo que echó mi tía que la puerta volvió a quedar abierta, lo que le
permitió escuchar cuando una prima le preguntaba a la otra:
- - Tú crees que estaba vez
si salga el condenado burro?
-
Plop!!