domingo, 4 de junio de 2017

Qué hacer para desengancharse



Estrategias y recursos 


Es una constante encontrar tanto en los eventos de formación como en la vida diaria, gente que se queja de lo abrumadora que resulta ser   la realidad actual del país.

Se manifiestan impotentes ante el tamaño de la situación y declaran que con frecuencia son presas fáciles de la misma, lo que se traduce en un desgaste emocional en forma de desesperos, impotencias, constantes rabias, tristezas, enclaustramientos y hasta ataques de pánico.

La mayoría de esta gente reconoce poseer una sed irrefrenable de información, lo que la lleva a conectarse en grupos a través del WhatsApp, el facebook, el instagram, twitter y cualquiera de las redes sociales que actualmente existen en el país. Todas estas conexiones se hacen únicamente dentro del ámbito de los afectos políticos en que la gente confía y simpatiza, por lo que constantemente están recibiendo la misma información.

Lo primero a destacar en este caso, es que inconscientemente el individuo utiliza una estrategia que secuencialmente desarrollada produce unos determinados efectos.
De acuerdo a lo que estamos tratando, las personas utilizan una estrategia absolutamente acertada para crear estados de stress y desasosiego, cuando se conectan en redes que hablan constantemente de lo mal que está la situación, de la falta de salidas a la crisis, de lo malo que es la contraparte del conflicto y, en una palabra, de la desesperanza que invade al país.

Cosa semejante ocurre con los celos, ya que la persona se pone celosa al visualizar en su mente a su pareja hablándole muy de cerca a otra persona; al escuchar palabras o frases cariñosas entre ellos y al sentir el frío paralizante que recorre su cuerpo al contemplar la escena.

Las estrategias, en este sentido, son las formas como organizamos nuestros pensamientos y nuestro comportamiento para llevar a cabo una tarea. Como vemos, se trata de nuestros pensamientos, cosa que ocurre solamente  en nuestra mente.

En ambos casos se trata del diseño de una estrategia muy bien delineada por el mismo individuo para crear su propio  estado de conmoción, de manera que si se quisiera salir del estado en que nos hemos metido por culpa de la estrategia utilizada, lo más sencillo sería, en primera instancia, cambiar la estrategia por otra que nos sitúe y nos promueva otro tipo de estado y por tanto nuevas emociones.

De las explicaciones, las justificaciones y de  las interpretaciones somos cada uno de nosotros los responsables, por lo tanto más que lo que ocurre en sí mismo, lo que nos mete en problemas es el procesamiento que hacemos en nuestra mente de lo que creemos que ocurre, o lo que es lo mismo, la información que recibimos a través de las redes a las que estamos conectados y a la que le damos credibilidad absoluta.

Lo segundo a tener siempre presente es que debemos estar conscientes de los recursos que poseemos para actuar en un determinado ámbito de la vida.

Si somos capaces de retomar nuestra vida cotidiana sin mayores gastos emocionales una vez recibida toda la información, entonces allí no hay ningún problema porque usted posee el recurso de disociarse de la situación problemática y de continuar con su transparencia.

Ahora, si por el contrario usted se mantiene las 24 horas del día asociado a la situación que le desencadena   un estado de zozobra, stress, tristeza, rabia, pánico, etc. significa que usted no tiene los recursos suficientes para actuar en ese ámbito; significa que usted se está auto infligiendo dolor y sufrimiento, por lo que lo más recomendable es que abandone esa estrategia hasta que adquiera recursos que le permita recuperar la transparencia en la que usted tiene el imperativo de vivir.

En resumen, si la estrategia que usted usa para apropiarse de la realidad le causa angustia, entonces cambie la estrategia por una que lleve sosiego a su vida.

Si actuar en un ámbito de la vida lo deja las 24 horas en un solo estress, lo mejor sería adquirir y desarrollar los recursos que no lo afecten al actuar en él  o simplemente renunciar a actuar en ese ámbito.


Recuerde que lo más importante es su salud física, mental y emocional, así que aprenda a desengancharse.