La
Familia WhatsApp
Nadie parece dudar que
las Redes Sociales (RS) llegaron para quedarse. Son muy pocas las personas que
en la actualidad no forman parte de al menos una Red Social, ya que para uno
existir para el comercio y los servicios, debe demostrar su partida de nacimiento en una de estas RS.
Al final las RS
terminan atrapando a los usuarios, convirtiendo a la mayoría en adictos a
alguna de estas comunidades de
intercambio comunicacional, al extremo de constituirse una relación que roza la
familiaridad y que en algunos casos funcionan como familias, al decantarse
estas sociedades por motivaciones que unen a personas con similares intereses.
Una de las RS más
populares es el WhatsApp, tal vez porque no necesita ningún tipo especial de
conexión y porque la gente se protege aún más al formar grupos con necesidades
comunes. Esto ha hecho que se constituya un entramado de relaciones que, con el
correr del tiempo, se consolidan como familias y hasta se declaran un afecto
supra familiar de iguales características con la consanguineidad.
De allí que a estas
alturas hay quienes se atreven a identificar similitudes entre los personajes
que existen en la familia WhatsApp y en la familia consanguínea, de manera que
en las próximas líneas intentaremos describir a algunos de estos protagonistas
presentes en el nuevo núcleo familiar en que se ha transformado esta famosa red
social.
Los
Conextualizadores/Los Descontextualizadores
En todo grupo de
WhatsApp que se preste de serlo, siempre existen aquellos personajes que se
encargan de mantener las conversaciones
dentro del contexto acordado. El contexto acordado generalmente es un enunciado
redactado por el administrador o creador del chat en el cual se declara un
propósito en términos de conductas observables (Ah pues, los chats siguen los
lineamientos del Conductismo) alrededor de las cuales girarán las
conversaciones grupales. “Se abre el
presente chat con la finalidad de compartir los conocimientos de la
manufacturación de productos artesanales, de manera que contribuya a la optimización de la economía familiar y
sus derivados”. Punto y final. A partir de allí comienza la gente a chatear
alrededor de ese gran objetivo.
Ah pero hay gente que
no aguanta la lengua digital y de inmediato entrompan Los Descontextualizadores “si no estuviéramos viviendo esta
situación tan insostenible a la que nos ha llevado el gobierno de
piiiiiiiiiiiiiii, no tendríamos necesidad de estar haciendo vainas
artesanales”.
Un buen Contextualizador sale al paso enseguida,
así incluso, coincida con esa opinión “Se
les agradece recordar el objetivo de este chat, de lo contrario nos veremos en
la penosa situación de pedirles que abandonen este sitio”. Aunque la
respuesta se redacta generalmente de forma impersonal, indudablemente que los
aludidos saben a quiénes se refiere la Administradora del Chat, claro, porque
generalmente se trata de una ella.
Esto a veces no es
obstáculo para que un fanático Descontextualizador
intente un revire con una respuesta del tipo “Pero es que no se puede tapar El Sol con un dedo”. La mayoría de
las veces la cosa queda hasta aquí por el momento, ya que los Descontextualizadores siempre
insistirán en una nueva atacada, sobre todo en tiempos de mayor crispación, que
son aquellos previos a una contienda electoral. O sea que se la pasan en eso!
Me dicen amigas Contextualizadoras que generalmente la
cosa no pasa a mayores porque ellas, entonces se comunican por el privado con los
violadores de los códigos y los sofocan con un “coño, vale, deja la vaina así; a mi también me gustaría decir esas
cosas, pero vamos a tratar de llevar la fiesta en paz”. Y así marcharán
hasta que se forme otro peo.
Esta fama que tienen Los Contextualizadores de aplicar el
alicate para sacar del aire a quienes salen de contexto, los ha llevado a que
la gente les ponga el remoquete de “Conatel”, o “Cortoelec”.
Ahora bien, no sólo Los Contextualizadores se preocupan por
mantener el orden dentro del chat, no. Hay una especie de Espontáneos que surgen con sus propias reglas morales y éticas para
imponer sus criterios acerca de lo que es correcto subir al chat.
Por ejemplo hay una
señora muy amiga mía que ella comparte muchísimas cosas con el grupo, pero
bástese con que le suban al Negro del WhatsApp para que a ella se le suba la
temperatura y se le descomponga la cuerpa
y comience a emitir regaños a diestra y siniestra. “Cómo es posible que unos hombres y mujeres profesionales no tengan
otra diversión que montar a ese negro horrible, indecoroso, poco edificante en
nuestro chat. Dónde está la creatividad de ustedes? O me van a decir que eso
también es arte? Espero no pasen más esos mensajes tan poco interesantes,
llenos de exhibicionismo y ninguna enseñanza, en resumen, feos. Se los
agradezco”.
Hay veces que jura ante todos que no le dará zoom al
negrito, pero un rato más tarde está comentando todas las horribles
características del africano, con más detalles que el que pudiera dar alguien a
quien sí le guste contemplar al Dr. Manguera.
Ahora bien el colmo de Los Contextualizadores es cuando ellos
mismos se convierten en Descontextualizadores.
No es muy común, pero de vez en cuando hay alguno que dice presente.
Este es el caso de una
joven abogada que por cuestiones que no vienen al caso para no descontextualizar,
se asimiló al mundo de la elaboración artesanal de harina de maíz. De pronto la
Dra. Arepa, así la llamaban clandestinamente,
pareció perder el objetivo del chat que ella misma había creado y
comenzó a publicar arengas políticas cada vez con un tono más fuerte y de
fanatismo exacerbado, hasta que alguien se encargaría de contextualizar a esta
administradora descontextualizada.
Así el vecino le
escribiría lo siguiente: “Señora X, yo no
estoy interesado en conocer la posición política de quienes no tengo registrados para esos fines. Yo soy su
contacto porque estoy interesado en la harina de maíz que usted hace y nos
vende. Por esa razón y abreviando la arenga que sobre el tema de la tolerancia
y del ejercicio del libre albedrío pudiera venir si demuestro condescendencia
en mi solicitud, le imploro sepa usted detener su molestosa práctica, ya que yo,
haciendo uso del mismo derecho que a usted la asiste, pudiera comenzar a
publicar artículos, fotos y videos de los grupos swingers (esos en los que se
intercambian parejas) a los que soy
aficionado, sin contar con su previo consentimiento. Verdad que sería muy
imprudente de mi parte? Por eso le sugiero seleccionarme sólo para ofrecerme información relacionada
con el propósito de este chat. Gracias, vecina”.
Y como en la Leyenda
del Horcón “Ni un quejido, ni un lamento salió de la habitación.” Último out,
se acabó el juego!
Los
Pacificadores
Del mismo modo en que
en las familias unidas por lazos de sangre existen personas que concilian las
posiciones encontradas entre miembros del núcleo, haciendo lo imposible por
llevar las relaciones de la mejor manera, en el WhatsApp existen los líderes
campeones en acciones de paz. A ellos los llaman Los Pacificadores. En algún momento se destacan en estos roles y
asumen la conducción del grupo conciliando posiciones, llamando a la sindéresis
a aquellos miembros que se encuentran en antípodas con otros, creando eventos
para el encuentro, trayendo a los miembros que se marchan bravos del grupo e
insertándolos, algunas veces, a pesar de la renuencia, “ya que familia que chatea unida, permanece unida. Qué es, pues?”.
Morelba, una amiga que
logró unir a un grupo que tenía más 35 años sin verse, juega perfectamente este
rol dentro de un grupo compuesto de viejos ex compañeros del liceo. Ella
mantiene el orden, llama a la cordura. Prepara reuniones conciliatorias. Media
en los conflictos de baja intensidad que eventualmente se suscitan. Facilita
estrategias de reencuentro y es capaz hasta de arbitrar en conflictos
interpersonales. Cuando alguien se sale del grupo, Morelba los mantiene
actualizados de lo que pasa a través del contacto privado y los días de sus
cumpleaños, los trae nuevamente al seno familiar para que reciban las
felicitaciones de sus hermanos. Si el manumitido se apendejea, Morelba se hace la loca y lo deja en el grupo sin que se dé cuenta. Al
irse a dormir More nos da las buenas noches y en la mañana temprano nos
despierta con los buenos días y la foto de un cafecito. En cinco años de vida
en este hogar, More jamás ha repetido el café mañanero; siempre ha sido un café
distinto cada mañana.
Definitivamente, por ser tan perfecta, la única forma que
Morelba exista es en la virtualidad.
Los Evangelizadores
Éstos constituyen un
tipo de Descontextualizadores que
por ser más fuerte que el odio, han
logrado subsistir en los grupos de WhatsApp. Ellos son como las batolúas y
empaltolaos que visitan las urbanizaciones y barrios los fines de semana.
Todavía no se ha conseguido el antídoto contra ellos.
Bien temprano en las
mañanas, durante las mañanas de todos los días del año, recitan algún salmo de
la biblia. Si están haciendo un curso de Milagros, entonces es una página del
curso. Y si no se traen un párrafo de la palabra diaria y lo presentan, bien como mensaje de texto, o bien como una
fotografía del libro en cuestión. Ellos están en todas las redes sociales.
Ah pero eso sí, al
terminar su mitin mañanero, como decía Héctor Lavoe, son otros manos cualquiera. Ya a media mañana se están cayendo a muelas
con cualquier rival político o religioso, olvidando por completo las
bendiciones y buenos augurios de la mañana. Por cierto estoy en un chat donde
el personaje de marras es una señora respetable que administra sermones y
bendiciones pero cuando se siente aludida por algún vecino no repara en decirle
“mire, parce, no sea busté tan piiiiiiii;
busté cree que porque me ve a mi mujer,
no crea que no le puedo dar sus piiiiiiii para que aprenda a respetar a las damas, vea”.
Por supuesto el respeto ya se lo tiene más que ganado.
Los
Querendones
Así como en el Duro
Copeo existen aquellos personajes que luego de 4 ó 5 tragos comienzan a tratar
a todos como hermanos, lo que en la etapa de la pea se conoce como la
Exaltación de la Amistad, bueno, en el chat a estos personajes los llaman Los Querendones, ya que ellos están
constantemente agradeciendo al Creador el haber puesto en su camino “a este maravilloso cual familiar grupo, el
cual viene a ser la familia que nosotros escogimos, porque ustedes saben que
nosotros nacemos ya con una familia, nos guste o no nos guste; pero ésta
familia que hemos escogido voluntariamente, es más importante aún que la consanguínea,
ya que nadie nos la ha impuesto y por eso yo me siento tan feliz …….”
Tal vez
sea por culpa de Los Querendones que
los chats del WhatsApp se han convertido en las familias que son. Existen otras
fuentes teóricas en las que a estos personajes los llaman Los Huérfanos, ya
que, dice la literatura, ojo, ellos
llegan a los chats con el premeditado fin de ser adoptados. Esperamos por hallazgos
empíricos!
Los
Malqueridos
Estos son unos
personajes que, prácticamente, desencajan en las familia en que conviven, no tanto porque en realidad
desencajen, sino porque más bien son las familias las que parecieran estar
desencajadas para ellos; de manera que al no encontrar eco en los grupos,
entonces están constantemente renunciando a ellos, independientemente que,
pasado un tiempito, llamen a la Administradora por el privado, solicitándole
ser readmitidos en los grupos. Al rato formarán una nueva querella y, una vez
calificado el grupo de “bonche fuuu” aparecerá en la pantalla del celular “za abandonó el grupo”.
Sucede como en las
mejores familias en las que hay miembros que se la pasan yéndose pal coño, pero
con la esperanza de tampoco ser admitidos en ese bochornoso lugar …o sea.
Los
Despistados
Ah bueno, como en todas
las familias existe al menos un despistado,
la familia WhatsApp no puede ser la
excepción, así que en ésta también hacen vida estos insufribles personajes.
Ellos se incorporan a
participar en los temas en el mensaje 543 y como opinan fuera de orden,
entonces pretenden que alguien los ponga al día haciéndole un resumen muy
sucinto del tema tratado. Ah, pero si usted les dice que se pongan al día leyendo
los mensajes, entonces se molestan y atacan a toda la familia con la manida
excusa de “bueno, y ustedes creen que yo
no trabajo; yo no tengo tiempo como ustedes para estar leyendo todo lo que
ustedes publican”. Listo: nos llamaron vagos, sin oficio, desempleados,
perdedores, losers, etc.
Lo otro que suelen
hacer los Despistados es que publican
cualquier cosa que ya se ha puesto en el site
previamente, llámese cadenas, fotos, videos, artículos o cualquier otro
refrito. Por eso alguien cansado de estos personajes, inventó un emoticón en el
que un pajarraco saca una tarjeta, tal vez roja, con la alerta en letras
grandes de REPETIDO, para de este
modo evitarse todas las explicaciones del caso.
Lo bueno es que ellos
se pierden por un tiempo, pero luego regresan, tal vez haciendo eficaz el
refrán de que el buen hijo vuelve a casa.
Los
Mudos
A éstos también se les
podría llamar los analfabetas, sino fuera porque más de un amigo se va a
molestar conmigo. Por eso lo coloco en minúsculas. También yo cariñosamente los
llamo Los Reyes del Caviar.
Lo que pasa con este
grupo bien definido es que en efecto, ellos parecen mudos, porque en realidad
no hablan, sino que se dedican a publicar cuanta vaina consiguen en la red, sin
hacer siquiera un escueto comentario de lo que montan. Y cuando son muy
exigidos se comunican a través de caritas, manitos, deditos, notas musicales,
etc.
Por cierto, esta parte
de la crónica se la pasé antes de su publicación, a una amiga que usa mucho el
lenguaje no verbal de los emoticones o emojis como también se conoce.
Esperando en vano su
opinión, solo obtuve de vuelta la carita de un emoticón.
Así que como no soy especialista en la materia tuve que ponerme a investigar
(pero no se asusten que de eso no hablaré en esta crónica) sobre lo que me
quería decir; de manera que encontré que la
redacción textual de esa carita era “Cara disgustada. Cara con la boca curvada en señal de tristeza. El emoji está triste y de mal
humor con su interlocutor y deja claro lo que siente en este momento con la
expresión de su cara.”
Conclusión:
reprobado por mi amiga la muda!
Finalmente
y antes de que se me olvide, viene a cuento lo de Los Reyes del CAVIAR, ya que ellos son expertos en publicar, provenientes
de la internet y muy poco de su propia creación, cualquier cosa relacionada con
Cadenas, Audios, VIdeos, Artículos y Refritos, al punto que ya hay gente que con todo el aprecio que le
tiene al Esturión del Mar Caspio clama porque no les suministren más CAVIAR, o sea.